El presidente de la Audiencia de Barcelona, Pablo Llarena, ha insistido en la quinta mesa del ciclo de Justicia de El Norte que justicia y periodismo «estamos condenados a entendernos» porque cada vez más los medios «invaden el espacio de la justicia continuamente».
Llarena, apoyado en el caso de un castigo que le puso su hijo y sobre el que el niño le respondió «esto no es justo», ha dicho que la justicia es algo innato de la persona y de hecho, de «derecho entendemos todos».
Respecto a situaciones que se están juzgando y que son de interés de la prensa, el presidente de la Audiencia, ha reiterado que las investigaciones «son secretas para todos los que no sean parte del asunto y a partir de ahí tenemos un problema», aunque sí que ha defendido que los jueces «no debíamos aplicar la ley de forma plana aunque sea secreto y no se pueda dar información».
Secreto virtual
Sobre el secreto de sumario se han pronunciado también otros de los miembros de la mesa. Tanto el magistrado de la Audiencia de Zamora, Jesús Pérez Sena, como el forense de esta misma provincia, Antonio González, han coincidido en señalar que en la actual situación se está hablando de «secreto de sumario virtual» porque se burla por parte de la prensa y eso «se tendría que regular».
Ignacio Sáez, director de servicios de la Consejería de la Presidencia, ha detallado algunas de las «condenas» que se han hecho en los medios de comunicación como uno en el que se podía leer «twitter pide cadena perpetua para Bretón». Ha detallado otros casos en los que los jueces, fiscales o abogados se suman a la ola del espectáculo televisivo mientras se están juzgando casos tan relevantes como el de las niñas de Alcáser.
Arancha Moretón, profesora de Derecho Constitucional de Derecho de Comunicacion de la UVA, ha dicho que el hecho de conocer el secreto es poder y ha insistido en que el problema del juicio paralelo es que se valora sin criterios técnicos y pasa por encima de derechos fundamentales.
Y finalmente, Jorge Sanz, periodista de El Norte de Castilla, se ha preguntado «qué sería de nosotros sin las filtraciones» y ha insistido en que las condenas las ponen los jueces no los periodistas. «Nunca en trece años he visto a un juez que haya condenado como yo haya dicho», ha sentenciado.