Arturo Criado (El Español) | El Gobierno ha destapado la caja de los truenos con su intento por regular el secreto profesional de los periodistas. No sólo porque el anteproyecto de ley trata de restringir ese derecho de la prensa en casos de seguridad nacional o emergencias; también porque ha reabierto un debate ya superado (o eso creíamos algunos) en la profesión: ¿Quién debe ser periodista?
El texto que ahora se somete a audiencia pública asegura que un periodista es “toda persona física o jurídica que se dedique profesionalmente a la búsqueda, tratamiento y difusión de información veraz de interés público, a través de cualquier medio de comunicación, con la finalidad de hacer efectivo el derecho a la información”.